ABANDONOS
Y ABANDONOS:
Dos palabras
idénticas que se utilizan de distintas formas.
Una de ellas
asumiendo la responsabilidad de que para conseguir unos objetivos (logros,
capacidades, etc.) hace falta realizar un trabajo. Un trabajo que puede ser más
o menos gratificante según las personas (seres individuales, independientes,
libres, tan iguales y tan distintos a la vez). Un trabajo que sumado a otros
trabajos puede ser asumible (realizable) por unas personas y no por otras, por
voluntad propia.
Este abandono se
suele dar a principio de curso. El otro abandono se suele dar a final de curso
para no asumir ninguna responsabilidad. Manifestando que no ha habido sintonía
con el profesor, que no ha sabido (el profesor) congeniar con el alumno; cosa muy
normal porque es imposible agradar a todos por igual (esto está explicado en la
entrada del blog "el mejor profesor"). Añadiendo que no ha sabido (el
profesor) motivar al alumno. Que el profesor le dejaba tanta libertad que el
alumno no sabía lo que tenía que estudiar. Sin asumir que si no lo sabe es
porque no quiere ya que la información la tiene todas las semanas verbalmente
en las clases y por escrito desde el principio del curso en la programación.
"Que fácil es
ver la paja en el ojo ajeno, y que difícil ver la viga en el ojo propio"
¿Estamos hablando de tocar el clarinete o de ir al
cine o a un parque de atracciones a pasar el rato y a divertirse?
La filosofía del
"esfuerzo" también vale para tocar el clarinete.
"Quien algo
quiere, algo le cuesta".
El trabajo bien
hecho tiene el premio de la satisfacción personal y es la mayor motivación para
"casi" todos.
ADELANTE...
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